La mayoría del Senado ha apoyado una propuesta de la Entesa Catalana de Progreso para eliminar el canon digital, eufemismo para denominar uno más de los robos que sufrimos los ciudadanos por parte de los políticos. Y empleo la palabra robo conscientemente, porque la cosa ajena, en este caso nuestro dinero, se quita con violencia; somos obligados a dejarnos robar mediante los resortes del Estado. No es que no nos demos cuenta, es que no podemos resistirnos.
Yo, particularmente, sólo uso el soporte CD para guardar documentos de texto creados por mí, pero da igual, tengo que pagar dinero a la SGAE por cada CD en blanco que compro.
Pero eso ya es sabido por todos y se han dedicado a ello miles de párrafos rebosantes de indignación. Lo peor es que después de que el Senado haya aprobado la citada propuesta, la SGAE ha "evacuado" un comunicado en el que dice lo siguiente:
"Hablando de siglo XXI parece mentira que, a estas alturas, un grupo parlamentario proponga iniciativas contrarias a la legislación internacional, haciendo gala de una irresponsabilidad impropia en una democracia moderna basada en el respeto a las leyes y a los derechos individuales"
Es decir, nos dicen que oponerse al robo es "impropio de una democracia moderna basada en el respeto a las leyes y a los derechos individuales". ¡Por favor! ¿Creen que es democrático que nos dejemos aplicar unas leyes claramente arbitrarias e injustas que tienen como resultado la sustracción de nuestro dinero? ¿Qué idea tienen de democracia? ¿Y de libertades individuales?
Me da la impresión de que para ellos democracia e imperio de la ley significa que hemos de someternos a cualquier ley diga lo que diga. Eso es totalitarismo puro y duro. Señores de la SGAE, roben mientras puedan, pero no den lecciones de libertades, se lo ruego.
