Mejor matar que enfermar

Los reclusos en las cárceles de Lancashire (Reino Unido) están pagando una libra para ver la televisión en sus celdas durante toda una semana. No lejos de allí, los pacientes de los hospitales del condado pagan alrededor de 16 libras para poder distraerse viendo la TV desde sus camas. Concretamente en el Royal Preston Hospital, en el Royal Lancaster Infirmary y en el Chorley and South Ribble District General Hospital han de pagar 2,90 libras diarias.

Occidente tiene unas legislaciones claramente ventajosas para el delincuente. Además se aplican de una manera humillante para las víctimas de forma que se permiten casos como el de Mari Luz o el de la austriaca secuestrada por su padre cuando ambos hijos de puta ya habán delinquido y deberían estar de por vida entre rejas. Pero se prefirió proteger a los violadores y pederastas que a sus futuras víctimas. A todo esto hay que sumar el exquisito trato que se da a los condenados del que da buena cuenta el ejemplo de la televisión que acabo de contar. Creo que es vejatorio para el resto de la sociedad.