Meteora es una región griega cuyo nombre significa "sostenerse en el aire". La geología de esa zona es espectacular y aprovechando esa singularidad había monjes que habitaban en sus cuevas y en los cortes de las rocas durante el siglo XI. Durante una época de ocupación turca los monjes encontraron en los gigantescos pilares de roca un buen refugio para protegerse. Y así fueron ocupando las zonas más altas. Una vez allí terminaron construyendo monasterios en lugares prácticamente inaccesibles subiendo los materiales a duras penas utilizando cestas con cuerdas, y durante mucho tiempo ésa fue la única forma de acceder a esas construcciones.
Durante la ocupación turca esos monasterios mantuvieron viva la cultura y tradiciones helénicas y no sólo fueron centros religiosos sino también académicoas y artísticos. Hoy en día sólo seis de ellos continúan en funcionamiento: Agia Triada, Varlaam, Agios Nikolaos Anapafsas, Roussanou, Megalo Meteoro y Agios Stefanos.