viernes, 8 de febrero de 2008

Negar la evidencia y maquillar la realidad

Acabo de leer que el Ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha declarado que hablar mal de la economía "no es éticamente responsable cuando hay gente que muere de hambre en África". Es decir, según Moratinos sólo será "ético" llamar la atención sobre los malos datos económicos cuando nos hayamos muerto de hambre. Decir ahora que la inflación es muy elevada o que el paro sube es inmoral. Si un español se lamenta de que le está costando llegar a fin de mes o de que ha perdido su trabajo, nuestro Ministro rápidamente responderá: "¿De qué te quejas?, si no te has muerto de hambre".

Nuestro Presidente ya había insultado ("A cada insulto que recibamos, nosotros una propuesta. A cada descalificación una idea. Y a cada exageración una sonrisa") a los que dijeran que la Economía española no iba bien. El miércoles 6 de Febrero de 2008 dijo que advertía alguna "dificultad" para, acto seguido, decir que esas dificultades vienen desde fuera lo que "no quiere decir que tengamos que reaccionar desde dentro". ¡Toma ya! Si las dificultades vienen de fuera no hay que hacer nada. Evidentemente este gobierno no está capacitado para dirigir un país.

Las tozudas cifras hablan de aumento histórico de paro, caída de la producción industrial, bajada de la confianza de los consumidores y de una inflación histórica. Eso es malo. Pero es peor tener unos dirigentes que no quieren o no pueden ver lo que está pasando y que son incapaces de tomar alguna medida. Pero ahora ya lo sabemos, hasta que no nos muramos de hambre no podremos quejarnos. ¿Esperarán hasta entonces para reaccionar?

Queda un mes hasta las elecciones y el gobierno va a tratar de maquillar, manipular u ocultar todas las cifras que vayan saliendo. Nuestra economía llegará a las elecciones con lápiz de ojos, base de maquillaje, rimmel, implantes,... Todo lo necesario para que una cara demacrada aparente una lozanía que perdió hace tiempo. Pero cuando la mañana del 10 de Marzo se presente ante el espejo desnuda de maquillaje y se pueda ver todo el deterioro causado en cuatro años de inacción será de verdad el momento de hacer algo. Espero que quien esa mañana cuide de ella sepa tomar las medidas necesarias para que esa cara vaya tonificándose.