Parece que en Gales andan como aquí en España, poniendo los carteles en dos idiomas (inglés y galés) aunque con uno de ellos se entere todo el mundo. Espero que no hayan llegado a la burrada de hacer eso mismo con los luminosos de las carreteras. Cuando te acercas a uno, lo intentas leer y resulta que aparece en vascuence tienes que estar pendiente de él para leerlo cuando cambie a castellano con el consiguiente riesgo para tu seguridad y para la de los demás.
El caso de la señal de tráfico de la imagen es bastante interesante. El texto en inglés dice "Prohibida la entrada a vehículos de carga pesados. Lugar residencial". La traducción al galés dice "No estoy en la oficina ahora. Envíe cualquier trabajo para traducir".
Cuando pidieron la traducción de la señal pensaron que la respuesta era lo que necesitaban, pero por desgracia el e-mail de contestación no decía lo que se esperaba. Aquí podéis leer la noticia en la web de la BBC.