El dinero público es para cosas importantes

Como un día cualquiera una casa unifamiliar estaba siendo asaltada por una banda de delincuentes, en este caso en Londres. El propietario, Simon Pither, sorprendió a los ladrones cuando estaban llevando a cabo sus planes. Le propinaron una brutal paliza de la que salió vivo por fortuna según los médicos. Las lesiones que sufrió en el cráneo pudieron haberle costado la vida, pero la rápida intervención quirúrgica, los 40 puntos de sutura tanto externos como internos y dos meses y medio de rehabilitación consiguieron que siga con vida. Durante la pelea Simon arañó a alguno de los ladrones y pudieron conseguirse restos de ADN para identificar a los asaltantes.

Dos meses después del asalto Scotland Yard llamó a Simon para decirle que no podían efectuar las pruebas de ADN porque no tenían dinero. Los laboratorios privados hacen pruebas similares a las necesarias por cerca de 250 euros en el Reino Unido.

Os he contado en este blog que están llenando Londres de cámaras de vigilancia con altavoces incluídos para reprender a los ciudadanos, que han colocado cerca de medio millón de aparatos de vigilancia en los cubos de basura de los ciudadanos británicos y que en ciertas localidades utilizan aviones espía para identificar a los ciudadanos que gastan más energía. Pero para proteger a los ciudadanos escasea el dinero.

Lo peor es que darán la vuelta a la tortilla de la manera habitual. Como no cogen a los ladrones habrá que gastar más dinero en quitar libertades a los ciudadanos corrientes con la excusa de defenderlos. Los gobiernos utilizan los resultados de su ineptitud para atribuirse más competencias.